El arte nos conecta con el aquí y el ahora; a través de la acción, de lo que sentimos y de las nuevas ideas que surgen en su práctica y contemplación. También permite el acceso simbólico a lo invisible, haciéndolo visible, y trae la presencia de lo inefable.

Conociendo estas cualidades del trabajo artístico, así como su potenciador de cualidades humanas, el equipo pedagógico de Sa Llavor pone en práctica en su reunión semanal el estudio de distintos lenguajes a través de los tres centros del ser humano:

-la acción, antes de comenzar la reunión semanal danzamos o nos movemos juntos. Armonizar el movimiento en equipo nos sintoniza y nos hace avanzar acogiendo la diversidad. Maite Villar, dentro del programa de colaboración con ESADIB, imparte semanalmente durante este primer trimestre un taller de movimiento significativo para los miembros del equipo.

-la sensibilidad, en la segunda parte del claustro compartimos una imagen que nace de nuestro interior: activando la Imaginación, Inspiración e Intuición. Además, cada miembro del equipo realiza al menos una pintura semanal relacionada con el momento en el que vive, estación, periodo lectivo o centro de interés. Las compartimos en ronda de escucha donde se cultiva el imaginario que acompaña al claustro.

-el pensamiento, durante la semana hay dos textos que compartimos en equipo y todas y todos rotamos en estas propuestas. Un poema o frase inspiradora nos acompaña durante todos los días antes de abrir las puertas . El segundo texto, de carácter pedagógico y compartido en la propia reunión Pedagógica, nos hace reflexionar sobre los principios de la Pedagogía Holística y cómo estos viven en nosotros. Ambos textos están presentes durante toda la semana en nuestros pensamientos para inspirarnos.